No era la senyera, tontos!

Hace muchos años, primeros ochenta -un domingo cualquiera-, comiendo en un modesto restaurante de cocina casera de la calle del Consejo de Ciento de Barcelona, mesa con mesa con él, un cliente habitual, algo exaltado aquel día, clamaba a viva voz; "....el Molt Honorable hijo de puta, Jordi Pujol", señalando con su mano -tenedor incluido-  hacia el receptor de televisión del comedor en el cual salía su imagen, recien estrenado su cargo. No eran tiempos fáciles, ni para mi padre ni para otra gente de bien, para que te pillara alguien insultando, ni difamando, ni ultrajando a una autoridad pública, siquiera al flamante nuevo President. Mi padre, incómodo por la situación, trataba de aplacar los ánimos de aquel, normalmente, correctísimo comensal (aunque el ojal de su chaqueta, lo atravesara el entonces semiclandestino pin de ERC), con el que departía a menudo, entre plato y plato, acerca de la excelencia de alguna de las especialidades de la casa; ("el cap i pota" d'en Pere Martí era sencillamente delicioso).

Ya alejados de la mesa, camino de casa, le preguntaba a mi padre, desde mis veinte escasos años, por la airada reacción de aquel señor, habitualmente mucho más amable, al oir el nombre  del Honorable. Al parecer, desde las filas de la Izquierda más nacionalista e independentista de entonces nadie se fiaba del recién nombrado Presidente. Republicanos y señoritos catalanes de buenas familias y grandes fortunas no se llevaban muy bien que digamos. Pertenecer o ser simpatizantes de unos u otros representaba odio visceral hacia lo opuesto.

Curiosamente pasados los años, acabaron haciendo migas y gobierno, aunados por un proyecto común de nacionalismo e independentismo, abrazados a una bandera, la senyera, paseada durante los últimos cuarenta años como simbolo excluyente de lo que ellos llaman L´Estat españyol, porque les produce sarpullidos en la lengua llamarlo sencillamente ESPAÑA.

Solo a través del insulto a lo espanyol han coincidido republicanos de la ERC y coaligados de la CDC y de UDC para lanzar su ataque final a su adscripción y pertenencia a España. Aquellos porque fueron toda la vida nuestros enemigos íntimos y estos porque durante años anduvieron flirteando frívola y ambiguamente con ese nacionalismo/separatismo de salón, a la espera de que su ruido cada vez más creciente produjera los efectos deseados.

En todo este tiempo, cerca de treinta y cinco años, es decir el tiempo transurrido entre la primera muerte de Chanquete, allá por 1981 y la última, trending topic el pasado martes 29 de julio, (...Chanquete ha muerto!....)  amasando fortunas y empujando a todo hijo de vecino a salir a la calle a reivindicar su nacionalismo.

Vaya buen ejemplo de papi, la auténtica herencia de todos los valores que tan impecablemente bien han aprendido los hijos. De tal palo, tal astilla. (pastilla, gansa pero gansa).

Incluye,  brillante, Fran en su post del pasado 31 de julio, en su blog

http://ensolo10minutos.com/wp1/ una insólita imagen de la inquietante y alargada silueta de Alcatraz (la "Roca"), como un viejo y oxidado barco anclado en su propia historia negra, pendiente de un desguace que no llega. Bien podría albergar, todavía, a tanto político corrupto y a mucho hijo de papá, lideres del enriquecimiento injusto y desproporcionado. Y que previamente devuelvan el dinero. (jajaja)

Y todo eso abrazado a la senyera.....

(Chanquete ha muerto!!!)